Objetivos principales:

• Mejorar el diseño de los envases para promover la reutilización y el reciclaje
• Aumento del contenido reciclado en los envases
• Lucha contra el embalaje excesivo
• Reducción de los residuos de envases

El 4 de marzo, la Unión Europea celebró un acuerdo sobre envases y residuos de envases, firmado por el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo. El texto se someterá a la aprobación de los representantes de los Estados miembros y de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento. En este caso, deberá ser adoptado por ambas instituciones, para su aplicación a partir de los 18 meses siguientes a la fecha de entrada en vigor.

El Consejo y el Parlamento han llegado a un consenso sobre una serie de puntos. Por ejemplo, no habrá restricciones a los envases de papel de un solo uso en los restaurantes, con solo un incentivo para proporcionar el 10% de la comida para llevar en envases reutilizables para 2030. Este resultado es mucho menos riguroso de lo que se preveía inicialmente.

Dado que ya disponemos de productos reciclables y soluciones de embalaje reutilizables funcionales, Duni Group está a la vanguardia del cumplimiento de la legislación. En general, acogemos con beneplácito la ambición de establecer un marco jurídico común para toda la UE, que garantice la uniformidad de las regulaciones.

Las PFAS no están prohibidas:

Cuando se trata de PFAS, no están prohibidos, sino reducidos a un cierto porcentaje. También en este caso, Duni Group está a la vanguardia, ya que desde el 1 de enero de 2024 hemos dejado de producir envases alimentarios con PFAS. Contamos con una de las líneas más extensas de productos libres de PFAS agregados para cajas, tazones, platos y bandejas sellables.

Exigirá reducir el consumo de plásticos de un solo uso, aumentar la recogida selectiva de residuos y ampliar la implicación y responsabilidad de las compañías en la gestión de sus residuos y en la información y sensibilización al consumidor.

• Nueva fiscalidad verde. Con el objetivo de prevenir la generación de residuos, por un lado, establece un nuevo impuesto que grava la fabricación de envases de plástico no reutilizables, que varía en función de la cantidad de plástico empleada y que excluye al plástico reciclado. Y por otro lado, aplica un impuesto al depósito de residuos en vertederos.
• Reducción de plásticos de un solo uso. Tomando como referencia los objetivos fijados por la UE, la legislación introduce objetivos concretos de reducción y prevé sustituir el uso de plásticos en aquellos artículos en los que haya alternativa y en caso de que no la haya, exige informar al consumidor sobre el impacto del producto y la gestión de su residuo.
• Reducción de los residuos alimentarios y pérdidas de alimentos a lo largo de la cadena de producción y suministro. Además de establecer nuevos objetivos de reducción, insta a las compañías a donaro redistribuir los excedentes o mermas para consumo humano o transformarlos en subproductos.
• Ampliación de la recogida separada de residuos, reforzando y ampliando los sistemas actuales. En el ámbito industrial y comercial será obligatorio separar por tipo de residuo (cartón, plásticos, aceites…) y también se fomentará la recogida de residuos orgánicos en los hogares.
• Adaptación de la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), que obliga a éste a pagar por la gestión de los envases que pone en el mercado. Este pago tiene un gran impacto económico en las compañías. (0,45 euros por kilo de plástico no reciclado)